A veces basta con echar un vistazo rápido a una captura de pantalla para saberlo de inmediato: Este juego podría ser algo muy especial. En Solarpunk Para mí, fue ese momento en el que una isla flotante yacía a la luz del atardecer, con campos bordeados de turbinas eólicas y un pequeño dirigible en el muelle. Parecía idílico, pacífico y casi como una utopía tangible. Sin embargo, este juego es mucho más que un bonito paisaje. Es un intento de replantear el género de la supervivencia: menos lucha, más cooperación, menos saqueo de recursos, ciclos más sostenibles. ¿Parece demasiado bueno para ser verdad? Eso es exactamente lo que quiero ver en detalle.
Un juego de supervivencia sin violencia: casi revolucionario
La mayoría de los juegos de supervivencia se basan siempre en la misma mezcla: hambre, sed, amenazas y enemigos que te complican la vida virtual. Con Solarpunk los desarrolladores de Cyberwave han tomado deliberadamente otra dirección. Aquí no hay batallas, sino que todo gira en torno a la construcción, la sostenibilidad y la creación conjunta de un mundo que ya tiene bastantes retos guardados. Solo o en cooperativo con amigos, construimos edificios, cultivamos, automatizamos procesos y viajamos por encima de las nubes en nuestra propia aeronave.
Que no haya oleadas de oponentes, ni Zombies o hordas merodeadoras es casi una pequeña revolución. La tensión se crea con una planificación inteligente, con el equilibrio de energía, alimentos y agua, y con la cuestión de cómo convertir tu isla en un auténtico oasis de bienestar. Es un juego de supervivencia que favorece deliberadamente la armonía sin aburrir.
La energía como latido del mundo del juego Solarpunk
El sistema energético, que desempeña un papel fundamental, me parece especialmente apasionante. La electricidad no se genera Estufas de carbón o generadores, sino por el viento, el sol y el agua. La producción depende directamente de las condiciones meteorológicas, así que si sólo dependes de los paneles solares, podrías tener problemas repentinos durante un periodo prolongado de lluvia. Por eso es esencial planificar con antelación. La energía se almacena, distribuye y transmite a los dispositivos de forma inalámbrica. Esto permite automatizar no sólo tareas sencillas, como regar las plantas, sino también cadenas de producción más complejas.
Lo más destacado: este sistema te obliga a pensar no sólo en el día siguiente, sino también en periodos de tiempo más largos. Marca la diferencia entre limitarse a mantener viva una isla y crear realmente un pequeño paraíso entre las nubes.
Agricultura y animales: una asociación en lugar de explotación
Otro detalle que me gustó de inmediato: En Solarpunk, los animales no son proveedores de recursos, sino socios. No hay granjas industriales ni caza para obtener carne. En lugar de eso, los animales ayudan a su manera. Los cerdos, por ejemplo, escarban en la tierra y sacan trufas a la luz... si los tratas bien. La agricultura es el proveedor más importante, y los que cultivan frutas y verduras también deben ser inteligentes con el agua para evitar la escasez.
Este concepto encaja perfectamente con la idea de Solarpunk: pacífica, sostenible, comunitaria. Es casi una pequeña crítica a los demás Juegos de supervivencia, a menudo sólo ven a los animales como presa o peligro. Aquí, en cambio, se demuestra que la convivencia también puede funcionar de otra manera.
Los dirigibles, clave de nuevos mundos
Ninguno Solarpunk sin exploración, y aquí es donde entra en juego la aeronave. Cada jugador puede construir su propia nave, personalizarla y utilizarla para viajar a nuevas islas. Estos viajes no sólo aportan recursos y materiales raros, sino también la sensación de viajar realmente por un mundo en las nubes.
La demo ya mostraba lo divertido que es despegar por fin tras horas de construcción. Por supuesto, el vuelo es más arcade que realista, pero eso es precisamente lo que lo hace tan divertido. Diriges tu nave, prestas mucha atención al viento y la energía, y te dejas llevar. Aquí hay potencial para grandes aventuras, quizá incluso para toda una historia que explique el mundo. Aún no sabemos qué planean los desarrolladores en este sentido, pero la sola idea ya despierta nuestra curiosidad.
Sistema de construcción y artesanía - Solarpunk es minimalista pero eficaz
Un juego de supervivencia depende de su interfaz de usuario. Cualquiera que se haya desesperado alguna vez en interminables menús de artesanía sabe lo rápido que puede perderse la diversión. Solarpunk hace muchas cosas bien aquí: en lugar de ventanas confusas, hay un menú radial compacto que muestra todo lo importante sin resultar abrumador. Herramientas, materiales de construcción, edificios... todo está a unos pocos clics.
Me ha gustado especialmente el énfasis en la claridad. Las herramientas se desgastan, pero pueden reconstruirse rápidamente. Incluso con el martillo de construcción, todo sigue siendo claro y sencillo. Hay suficientes opciones para realizar construcciones creativas sin sentirse abrumado por la variedad. Pocos juegos consiguen este equilibrio entre libertad y visión de conjunto.
La visión de Cyberwave: pequeña pero ambiciosa
Solarpunk procede del estudio de desarrollo alemán Cyberwave, que en el pasado ha desarrollado títulos menores como Hourglass. Con el apoyo del editor rokaplay ahora dan el gran paso hacia la fama internacional. La proximidad con la comunidad es notable: la demo ya demostró que las ideas de los jugadores se toman en serio y muchas funciones se basan directamente en los comentarios.
El hecho de que se trate de un estudio comparativamente pequeño sólo se nota en el desarrollo gradual. Por lo demás, Solarpunk sorprendentemente fluido y ambicioso. Gracias al motor Unreal Engine 5, el mundo no sólo tiene un aspecto precioso, sino que también se ejecuta con fluidez. El estilo artístico en particular, una mezcla de claridad minimalista e idilio colorista, hace que el juego destaque entre la multitud.
Supervivencia con un toque acogedor: lo acogedor se une a la estrategia
La categorización también es interesante: Solarpunk es un juego de supervivencia, pero al mismo tiempo pertenece al llamado Juegos acogedores. Estos juegos ponen menos énfasis en el estrés o el combate y más en la relajación, la atmósfera y la sensación de llegar realmente a un mundo. En Solarpunk este enfoque se une a mecánicas clásicas de supervivencia como el hambre, la sed y la escasez de recursos. Una mezcla emocionante que debería gustar tanto a los fans de los juegos de construcción acogedores como a los veteranos de la supervivencia.
Y con la mano en el corazón: ¿cuántas veces te apetece simplemente construir una base pacífica sin que un zombi salte inmediatamente por la ventana? Aquí es exactamente donde Solarpunk como un juego para respirar hondo, pero no sin ambición.
Gráficos, atmósfera y rendimiento
El diseño gráfico de Solarpunk no es fotorrealista, pero estilizado, y eso encaja a la perfección. Praderas verdes, paneles solares resplandecientes, elementos de construcción futuristas y un cielo lleno de islas flotantes crean una atmósfera futurista y familiar al mismo tiempo. También hay un ciclo dinámico día/noche y efectos meteorológicos que no sólo son bonitos, sino que también influyen en la jugabilidad.
El juego ya era estable en la demo y los bugs importantes eran escasos. Esto también contribuye a la impresión positiva. Después de todo, ¿de qué sirve la visión más hermosa si falla debido a problemas técnicos? Cyberwave ha hecho muchas cosas bien hasta ahora.
Esperanza y expectación ante Solarpunk
Solarpunk es algo más que otro juego de supervivencia. Es una invitación a replantearse el género. En lugar de la violencia y la destrucción, aquí la atención se centra en la comunidad, Sostenibilidad y la creatividad cobran protagonismo. Con su enfoque pacífico, su ingenioso sistema de energía y sus encantadores dirigibles, destaca gratamente sobre la competencia.
Por supuesto, queda por ver qué alcance tendrá realmente la versión completa. Pero ya hay muchos indicios de que Solarpunk podría convertirse en un título del que se hablará durante mucho tiempo. Especialmente en tiempos en los que muchos juegos se centran en la acción trepidante, este proyecto es una grata excepción. Quizá incluso un pequeño rayo de esperanza en los cielos del mundo de los videojuegos, en el sentido más estricto de la palabra.