El trabajo es toda la vida, al menos en la Simulación de construcción Smart Factory Tycoon, desarrollado por Turquoise Revival Games y publicado por GrabtheGames e IndieArk. En el juego, tú como jugador puedes hacer realidad los sueños de los niños. Tu tarea consiste en construir y gestionar una fábrica en la que se producen diversos juguetes.
Trabajadores incansables
Fabricar juguetes es un trabajo de 24 horas. Para que los ojos de los niños se iluminen pronto, primero planificas el tamaño de tu fábrica y montas las primeras máquinas pequeñas. Pero, ¿dónde están los trabajadores? Todavía hay que traerlos, claro.
Como pequeño Knack no consigues empleados de carne y hueso. Al fin y al cabo, las personas sólo pueden rendir hasta cierto punto por naturaleza. Necesitan descansos, dormir y comer. Y para colmo, ¿quieren dinero por su trabajo?
Porque tal descaro es intolerable, no hay Fábrica Trabajadores de acero y cromo. Puedes encargar robots que lleguen en tren, barco, camión o incluso globo aerostático, solo para trabajar para ti sin parar.
Expansión creativa
En el corazón de Smart Factory Tycoon está el desarrollo y la expansión de tu empresa. Construyes productos como juguetes, bicicletas u osos de peluche, gestionas cada uno de los pasos de producción y entregas tus productos. Para ello ganas dinero, pero también experiencia. Esto te permite desbloquear gradualmente nuevas máquinas, nuevas líneas de producción y mejoras para tu fábrica. Entre otras cosas, puedes aprovechar nuevas fuentes de energía a medida que progresas. Por ejemplo, si te centras más en la energía eólica y los paneles solares, puedes ahorrar costes que puedes reinvertir en tu empresa.
Pero sus trabajadores también cobran Experiencia. Puedes mejorarlos a lo largo del juego para que trabajen de forma más eficiente, sigan sus rutas más rápido o produzcan productos aún mejores. Sin embargo, la gestión de los recursos es importante para no acabar gastando en todas las mejoras más dinero del que puedas ganar.
Pequeñas deficiencias
Si compara Smart Factory Tycoon con otros simuladores de construcción como Pequeño gran tallerentonces puede reconocer algunos pequeños compromisos. Entre otras cosas, su gama de productos es mucho más limitada. Sólo fabrica juguetes y, por desgracia, nada más. Además, aunque el factor adorable está previsto, se queda un poco corto. Little Big Workshop convence un poco más. Los trabajadores corretean mucho más, lo que hace que sea más divertido verlos producir. También puedes elegir diferentes categorías de productos, lo que te da mucha más libertad a la hora de diseñar tu empresa.
Pero sigue ofreciendo Inteligente Factory Tycoon es forraje suficiente para que los aficionados a los simuladores de construcción pasen horas diseñando su propia fábrica de juguetes y haciéndola cada vez más grande.